En el marco de la solemnidad de la Inmaculada Concepción, el cardenal Adalberto Martínez Flores, arzobispo de Asunción (Paraguay), presidió la misa en el santuario de la Virgen de Caacupé, de la diócesis de San Justo, junto con el obispo diocesano, monseñor Eduardo García.
Al finalizar la misa en guaraní, monseñor García expresó: "Cuando se construyó esta iglesia, soñábamos con que fuese la casa de todos los hermanos paraguayos; pero lo que no imaginábamos era que se transformara en un santuario".
"Porque el santuario lo hace la gente y acá ustedes lo han hecho. Por eso, a partir de este domingo, esta iglesia es oficialmente, en la diócesis de San Justo, el santuario de Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé", anunció.
Llegados de distintas partes del conurbano bonaerense, miles de migrantes paraguayos rindieron devoción a su Madre. Durante un mes, la comunidad de la parroquia San José de La Matanza había peregrinado por los barrios del municipio, llevando la bendición a cada casa y convocando para el fin de semana de la Virgen.
El sábado 7, el itinerario culminó en el Polideportivo San José, con más de 200 confirmaciones de adultos y primeras comuniones. La jornada culminó con grupos folclóricos y danzas paraguayas, como serenata para la Virgen.
El domingo 8, además de la misa en guaraní, se realizaron bautismos y casamientos. El día transcurrió con la visita de miles de fieles de diferentes localidades, que fueron al encuentro de su Madre.
El cardenal del Paraguay le confesó a la comunidad que lo embargaba una emoción profunda y que le había pedido al Papa Francisco llevarles a los presentes un saludo de su parte.
Antes de seguir su visita por distintas parroquias del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el cardenal Martínez Flores manifestó: "Este templo es una maravilla".
"Felicidades a María Santísima, que ha querido que se le construya este templo aquí en La Matanza. Me alegra mucho ver estas pinturas que hablan del trabajo de ustedes en el templo. Me recuerda las palabras de San Pedro, cuando decía: 'Ustedes son las piedras vivas en la construcción de este templo espiritual'", trajo a la memoria.
El fin de semana culminó con ese anuncio oficial de nombrar santuario a esa casa de Dios. Al lema de "La Matanza tiene Madre", se le sumó "y esa Madre tiene santuario".
La diócesis de San Justo destacó: "Así, la historia de un grupo de promeseros llega a su punto más alto. Hace cinco años, comenzaron con una peregrinación. Ellos les prometieron una casa en su barrio y la hicieron. Año tras año, el sueño fue tomando forma y trajeron su imagen para entronizarla en esta capilla, que hoy es santuario. Y lo imposible se hizo realidad.
En el marco de esta celebración eucarística, se anunció que, en octubre de 2025, se realizará desde La Matanza una gran peregrinación hacia Caacupé, para agradecer a la Madre del Paraguay tantas bendiciones.+