Y entonces tenemos que seguir rezando para que Dios y la Virgen del Valle quieran que este año tengamos la Beatificación de Fray Mamerto Esquiú. Catamarca Argentina y Latinoamérica se lo merece y lo necesita, es un gran ejemplo para todos nosotros; pero como bien nos ha dicho nuestro Obispo, no podemos vivir de las glorias pasadas, sino que también a cada uno de nosotros nos compete poner nuestro grano de arena porque en nuestro testimonio, en nuestra forma de vida, podemos transparentar esa devolución que le tenemos a Fray Mamerto Esquiú.
Sería lindo, sería hermoso que llegando la Beatificación esté pavimentado el camino y acondicionando este lugar sagrado donde Fray Mamerto Esquiú nació para el cielo, porque así decían los antiguos, el "dies natalis", el día en que se nace para el cielo, pueda tener también este lugar importante para Argentina.
El llegar a la Beatificación es todo un movimiento, no solamente religioso sino también para las autoridades civiles, entonces cada uno de nosotros sabrá cómo tiene que aportar para que sea un momento en el que podamos presentar al resto de Argentina y al mundo El Suncho bien arreglado, como lo merece y como lo quisiera Fray Mamerto Esquiú. Que Dios bendiga de corazón y sigamos rezando, no aflojemos que las cosas van muy bien."