“No podemos dejar de denunciar que esta normativa bajo la supuesta tutela de derechos lo que conlleva es una violencia adicional contra la vida, aparte de las que estamos acostumbrados a ver todos los días en esta Ciudad (pobreza, marginalidad, trata de personas, trabajo esclavo, entre otras); que forman parte de un cóctel que solo sirve para presumir de derechos que conllevan el signo de la desvalorización de la vida”, advirtió en un manifiesto.

ACBA adhirió a la declaración de los obispos emitida el 16 de julio e invitó al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, los legisladores de la Ciudad y a todos a “construir juntos las medidas necesarias en pos de procurar el desarrollo de la vida, su protección en cada uno de sus etapas, sin ninguna discriminación etaria ni de estamentos sociales”.

“Pedimos a nuestra Madre de Luján, que nos proteja y guíe a todos en este tiempo especial de nuestras vidas, y proteja a los que padecen las desigualdades que este tiempo de pandemia ha mostrado en carne viva”, concluyó.

Texto del manifiesto
Queridos presidentes, dirigentes y miembros de nuestra Acción Católica de Buenos Aires:

En este tiempo difícil que nos toca transitar, muchos de nosotros, estamos ocupados atendiendo a familiares y amigos enfermos, o que están padeciendo alguna de las consecuencias que la pandemia del Covid19 está ocasionando en nuestra sociedad, poniendo de manifiesto la tremenda desigualdad social y de vulnerabilidad a la cual son sometidos muchísimos habitantes de nuestra querida ciudad. Como Consejo Arquidiocesano de la Acción Católica de Buenos Aires nos vimos sorprendidos por la decisión de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de aprobar por amplia mayoría la adhesión a la interrupción Legal del Embarazo (ILE), esto es, el aborto no punible, que ya se practica en gran parte del país.

Como miembros de esta Iglesia de Buenos Aires, queremos reiterar y declamar que es nuestra misión el ANUNCIO y la DENUNCIA de cualquier forma que violente la vida, desde la concepción hasta la muerte natural. Por lo tanto no podemos dejar de denunciar que esta normativa bajo la supuesta tutela de derechos lo que conlleva es una violencia adicional contra la vida, aparte de las que estamos acostumbrados a ver todos los días en esta Ciudad (pobreza, marginalidad, trata de personas, trabajo esclavo, entre otras); que forman parte de un cóctel que solo sirve para presumir de derechos que conllevan el signo de la desvalorización de la vida.

Por todo lo expuesto adherimos a la declaración de nuestro obispos emitida el 16/07/2020 e invitamos al jefe de Gobierno, y a los legisladores, así como a TODOS, a construir JUNTOS las medidas necesarias en pos de procurar el desarrollo de la vida, su protección en cada uno de sus etapas, sin ninguna discriminación etaria ni de estamentos sociales.

Pedimos a nuestra Madre de Luján, que nos proteja y guíe a TODOS en este tiempo especial de nuestras vidas, y proteja a los que padecen las desigualdades que este tiempo de pandemia ha mostrado en carne viva.+