Asimismo, dijo que “el hecho de venir y prestar un servicio en el Santuario es una gracia muy grande que Dios otorga, y hay que darle una respuesta acorde con esa gracia… Acá vienen los peregrinos, los devotos de la Virgen, y debemos escucharlos”. En este punto señaló que “hay una pastoral muy importante que la hemos comenzado a trabajar en este camino sinodal, que es la pastoral de la escucha. Escuchar al otro, su problema, su dificultad, para llevarla a la oración. Y si tenemos que escuchar a tanta gente que viene, tenemos que saber dialogar, orientar, y para eso nos tenemos que capacitar y así prestar un servicio cualificado, acorde a ese peregrino que viene acá, que se quiere encontrar con la verdad de la fe, con la verdad del amor, con la vedad de la acogida, con la verdad de la misericordia de Dios”.
Finalmente, animó a los participantes a dialogar, hacer propuestas, escucharse para corregir lo que sea necesario corregir, “no se trata de criticar el pasado, se trata de ver el presente y cómo caminamos para adelante, con esperanza, con alegría, con espíritu de servicio”, expresó.