“Hicimos gestiones para llegar a esto con el Dicasterio para el Culto divino y Disciplina de los Sacramentos de la Santa Sede. Fue necesario hacer algunas reformas en el presbiterio y en el templo, y luego fue aprobada Nuestra Señora de la Consolata como basílica menor”, explicó el obispo.

A la vez, destacó que la fecha de elevación a basílica fue elegida por tratarse del 90° aniversario del terremoto ocurrido en Sampacho, que provocó la destrucción del templo de entonces y en el que no hubo víctimas fatales. “Este hecho se le atribuye a la intercesión de Nuestra Madre. Y, al día siguiente, comenzará la novena que culminará con la gran fiesta que tenemos siempre los 20 de junio en Sampacho, fecha de la patronal de Nuestra Señora de la Consolata”, añadió.

“Vamos a contar con la presencia del arzobispo de Córdoba, cardenal Ángel Rossi SJ. En Córdoba tenemos un privilegio, tenemos un cardenal y, además, con lo accesible que es el padre Ángel, enseguida aceptó la invitación, y también participarán otros obispos que han sido especialmente invitados”, concluyó.

De la conferencia de prensa también participaron el padre Osvaldo Leone, rector del santuario de la Consolata; el padre Carlos Forcato, responsable de la Comisión diocesana de Liturgia; y el intendente de Sampacho, Franco Suárez.

El padre Forcato explicó que, “antiguamente, en Roma, ‘basílica’ significaba ‘casa del rey’, y de ahí que se use el término para denominar grandes templos donde se celebra el culto”. En el mundo, hay aproximadamente 1500 basílicas menores. Las 4 basílicas mayores se encuentran en Roma y son: San Pedro, San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San Pablo Extramuros.

“Hay tres insignias que distinguen una basílica: el escudo propio (identifica las características de ese lugar y lleva el signo de San Pedro), la umbrera (es un paraguas que será colocado en el presbiterio con los colores papales que se usaban antiguamente: rojo y amarillo) y el tintinábulo (elemento antiguo que tiene una campanita, que anuncia el comienzo de la celebración de la misa y, si llegara a venir el Papa —ojalá que así sea—, se va anunciando haciéndola sonar). Y, algo muy importante, como se han dado cuenta: las basílicas están unidas muy estrechamente al Papa, y por eso llevan sus símbolos”, detalló.

Por su parte, el padre Leone se refirió a los trabajos previos, que comenzaron en el año 2013, y destacó que la elevación a basílica es “un homenaje a todo el pueblo de Sampacho que ha hecho historia, a los que ya no están, que han hecho de su vida una ofrenda total, un homenaje a su devoción marcada por la Consolata, su religiosidad, que vemos plasmada tanto en la belleza del santuario como en su trabajo apostólico”.

Según explicó el padre Leone, el 10 de junio, a las 16, “habrá una misa en el interior de templo, y afuera habrá pantallas y sillas para seguir la ceremonia. La presidirá el cardenal Ángel Rossi SJ, y concelebrarán monseñor Uriona y otros obispos y sacerdotes. Luego habrá chocolate y torta para todos los presentes, y un espectáculo musical, entre los que estará la banda del Batallón local”.

El intendente local, asimismo, señaló que el acto “no solo pone en valor el santuario, sino a toda esta comunidad. Soy feliz como intendente, pero más como vecino, e invito a que vengan el 10 de junio a la fiesta que vamos a vivir en Sampacho, con la basílica de la Consolata”.

Fe en la Consolata
La devoción a Nuestra Señora de la Consolata llegó a Sampacho —comunidad fundada por 100 familias inmigrantes del Piamonte italiano y un sacerdote franciscano, allá por 1875— ya iniciado el siglo XX, cuando un sacerdote de Turín, el padre Juan Cinotto, divulgó la imagen de esa adocación y propició su veneración.

En 1908, llegó en barco, al Río de la Plata y luego a Sampacho, una imagen corpórea de Nuestra Señora de la Consolata, que pesaba 1.232 kg. Hasta el día de hoy, cada 20 de junio, un grupo de hombres la llevan a pulso a lo largo de 16 cuadras, en un modo muy tradicional y expresivo de expresar su piedad. En 1946, el templo fue declarado santuario y este año de 2024, en poco más de un mes, la casa de la Virgen será erigida como basílica.

Sus devotos le piden por la vista, sus ojos y las enfermedades que puedan padecer en ellos, porque se han conocido muchas maravillas relacionadas con la vista y la devoción a la Consolata.

Para más información, contactar a Virginia Bonard al +54 9 11 5 934 1461 o, vía mail, a virginiabonard@gmail.com; o bien a Marcelo Bertone, al +54 9 342 520 7985 o a mgbertone@gmail.com.+